Durante el mes de julio de 2022 aprovechamos el viaje de varios miembros de la Asociación Twenge para impulsar algunos proyectos en la aldea batwa de Gatonde (Burundi). Uno de ellos fue la donación de ropa para sus habitantes, un bien básico muy necesario ya que muchos de ellos cuentan con una única muda, que en numerosas ocasiones está roída o desgarrada por el paso de los años. Tal fue el éxito de esta iniciativa que volvimos a repetirlo durante el mes de agosto de 2023, aprovechando la visita de otros miembros de la Asocación Twenge.

Así pues, conociendo estas necesidades que se daban en esta comunidad, varios meses antes comenzamos una campaña de recogida de ropa desde diversos puntos de España, centrándonos en prendas para bebés y niños. La acogida fue espectacular: recibimos unos 120 kg de ropa desde Mandín, Montijo, Mérida, Cáceres, Jerez de la Frontera, Chiclana, Jaén, Sevilla o El Puerto de Santa María.

Una vez que la ropa llegó a Burundi, no sin dificultades por pérdida de maletas, quisimos reunirnos con el comité de sabios de Gatonde. Mediante este encuentro evaluamos la situación de las diferentes familias para poder repartir las prendas en función de sus necesidades, ya que pudimos comprobar que había muchos niños que ni siquiera tenían pantalones en su día a día. De este modo, el reparto se realizaría de la forma más equitativa y justa posible.

El día de la entrega de ropa contamos con la colaboración de varios jefes de la aldea. Bosco, Jean Marie, Bruno, Dionèse o Evariste organizaron este reparto para que ninguna familia necesitada se quedara sin prendas para sus hijos. Las caras de las madres y los niños rebosaban felicidad, con un brillo en los ojos y unas sonrisas difíciles de encontrar. Algunos niños, con zapatos por primera vez en sus vidas, corrían y saltaban de alegría, incrédulos ante tal sensación. El ambiente en Gatonde era de absoluta emoción y júbilo, a la vez que gratitud por estas donaciones.

De nuevo en agosto de 2023 repetimos un procedimiento bastante parecido, recibiendo donaciones de ropa de diversos puntos de la geografía española: Galicia, Extremadura, Andalucía, Asturias, Canarias o la Comunidad de Madrid mostraron su solidaridad con la aldea de Gatonde.

El reparto de ropa, una vez allí, estuvo muy bien organizado por las autoridades locales y la ayuda de Amidou y Alice. Mención especial merecen los habitantes de Gatonde, que mostraron una gran paciencia, gratitud y colaboración para que la distribución se hiciera lo más equitativa y justa posible. Cómo no, las escenas de alegría fueron una constante durante toda la tarde:

Este proyecto nos ha demostrado las enormes desigualdades que existen en el planeta, donde muchas personas acumulamos armarios repletos de ropa olvidada y otras ni siquiera tienen qué ponerse. Un pequeño gesto puede cambiar y mejorar muchas vidas. Infinitas gracias por todos aquellos pequeños gestos que hemos recibido.